Tenía una habitación ordenada, sorprendentemente nueva, con balcón, un bonito jardín, dormí muy bien. El personal fue muy amistoso y extremadamente agradable, los propietarios también. La ubicación era increíble y buena y el parking gratis estaba cerca. Además, estaba justo al lado de la playa y de la colina.

La ubicación del hotel es excelente, a pocos pasos del océano y del centro de la ciudad. El personal, incluido el director, fue muy amigable. La habitación que reservé era espaciosa, súper limpia y contaba con un bonito jardín y balcón.

desayuno con té de menta y también sabroso pan. ubicación buena e increíble, en una zona turística.

La propiedad está bien cuidada y el personal es absolutamente agradable. Las habitaciones son bonitas y muy limpias, con balcón. La ubicación es excepcional, super cerca de restaurantes, tiendas y el centro, en una zona estupenda. Tardé 15 minutos en llegar a la playa de Saint Julian's andando. Recomendamos este hotel a cualquiera que se quede en Ericeira.

El hotel está ubicado en un entorno privilegiado, junto a la playa y con vistas al océano. Además, se encuentra en una zona turística, lo que ofrece diversas actividades y entretenimiento para los huéspedes. Las habitaciones son preciosas y cada una tiene su encanto, como se menciona en los comentarios de otros huéspedes. La limpieza es impecable y la cama es muy cómoda, lo que garantiza un descanso placentero. Además, el desayuno es amplio y variado, con opciones naturales y adaptadas a intolerancias, como se destaca en las reseñas.

Sería recomendable disponer de más opciones de entretenimiento en las instalaciones del hotel para aquellos días en los que los huéspedes prefieran quedarse descansando en el lugar.

Este lugar es increíble, nos quedamos encantados durante 4 noches y si volvemos a Portugal, definitivamente nos alojaríamos aquí de nuevo, el bar es bonito.

Mimo de los dueños, desayuno maravilloso, limpieza exquisita, entorno precioso.

Nada.

Este hotel es un verdadero tesoro escondido al lado del océano. El trato recibido por el personal fue excelente, siempre atentos y dispuestos a ayudar en lo que necesitábamos. Las habitaciones son acogedoras y tienen un encanto especial, especialmente aquellas con un balcón con vistas al mar. Además, el desayuno fue simplemente delicioso, con una gran variedad de opciones y productos naturales. Definitivamente, este hotel es una elección perfecta para una escapada romántica en una zona turística tan hermosa como esta.

No tengo ninguna queja, todo estaba perfecto.

Vistas espectaculares y desayuno delicioso, trato amable y atento, limpieza impecable, recomendaciones útiles y atención personalizada.

Nada, todo bien.